viernes, 23 de diciembre de 2011

CAPÍTULO 3: LAS COSAS PASAN CUANDO MENOS TE LO ESPERAS, SOLO TIENES QUE CREER.

Decidí no hacer caso a los gritos de mis padres, y me seguí pintando. Justo cuando estaba a punto de coger el brillo de labios, quien yo pensaba que era mi padre, abrió la puerta.

- (tn) : Hola papa, ¿como es que has llegado tan pronto? 
– dije sin mirar quien había en la puerta…

- Cody : Hola hija, yo tampoco esperaba estar aquí tan pronto. 

Estoy soñando, demasiado bonito para ser real, pensé. Aunque su voz no la confundiría nunca, esto tenía que ser un sueño. Me gire, lentamente sin creerme aun lo que estaba pasando, y efectivamente era él. Mi pulso empezó a hacelerarse. Cuando me pasaba esto me daba realmente miedo, porque me temblaban hasta las piernas y mi equilibrio era desastroso. Después de unos segundos en estado de shock, por fin reaccione. Es impresionante todas las cosas que pasaron por mi cabeza en menos de diez segundos.

- (tn) : AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH! CODYYYYYYYYYYYYYYYYYYYY! – dije mientras corría hacía a el.

- Cody : Yo me alegro mucho más de verte – dijo cogiéndome entre sus brazos.

- (tn) : Espera, ¿eres real? Que haces aquí! – dije mientras le tocaba la cara.

Me miro, y se limito a bajarme de sus brazos y darme un abrazo. Si, lo confirmo, unos de los mejores abrazos que me han dado y que me darán en toda mi vida. Escuche que alguien gritaba mi nombre desde el comedor, y salí corriendo otra vez, era el pequeño y adorable Tom.

- Tom: AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! Que ganas tenía de verte!

- (tn) : TOOOOOOM! Yo también pequeñajo! Aunque ya no eres tan pequeñajo… Como has crecido en un año!

- Alli : Bueno, me siento ignorada!

- (tn) : ALLLIIIIII!!! Como me alegro de veros! 

- Alli: Y nosotros. Teníamos muchas ganas de venir. No he visto en mi vida a Cody tan nervioso. – Dijo mirándolo.

- Cody : No estaba nervioso…

Les di un abrazo a los padres de Cody. Y en ese momento entendí porque me tenía que poner guapa esta noche. Mi madre y Leonardo lo sabían todo. Menos mal, porque de no haber sido así, esta noche iría con unos tejados, unas botas y una camiseta normal y corriente. 

- Alli : Vamos a comprar comida , os venís? - dijo mirando otra vez a Cody.

Cody se acerco a mi oído y me dijo: En realidad van a comprar regalos para Tom, mañana es navidad y nos quedaremos aquí a dormir.

- (tn): Es que me tengo que acabar de pintar… Ir, yo me quedare aquí con Tom.

- Cody : Si, yo también me quedaré aquí con Tom.

- Alli: Bueno, pues no se hable más, nos vamos. Luego venimos.

Cody y Tom, me siguieron hasta mi habitación y cerraron la puerta.

- (tn) : ¿Como es que estáis aquí? ¿ Porque nadie me ha dicho nada? Esta mañana hemos hablado por teléfono y no me has dicho nada!- dije mientra me aplicaba el brillo de labios.

- Cody: Claro, las sorpresas no se dicen! 

- Tom : Nos quedamos a dormir en tu casa! Jupiiiii!

- (tn) : Que bien! ¿ Y cuanto os quedaréis?

- Cody: ¿Cuánto quieres que nos quedemos?

Me entraron ganas de gritarle, NO TE VAYAS, QUIERO QUE TE QUEDES SIEMPRE CONMIGO! Pero me contuve. 

- (tn) : No lo sé… Todo el tiempo que queraís.

- Cody : Nos quedaremos todas las navidades.

- (tn) : Os quedaréis más de dos semanas en mi casa?!

- Tom: SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII! 

- (tn) : Y yo que pensaba que estas navidades iban a ser aburridas…

- Cody : Yo también lo pensaba, iban a ser las primeras navidades que no íbamos a pasar juntos. Eso no se puede permitir.

- Tom: Tiene razón. Aunque creo que lo que no podía permitir es no estar contigo.

- Cody: Toooom! Callate!

- (tn) : Pobrecíto, no ha dicho nada malo. Al contrario, me gusta lo que dice.

- Tom: Eso, solo he dicho la verdad!

Cody estaba más rojo que un tomate. Estaba pasando un mal rato, así que decidí cambiar de tema.

- (tn) : Tom, que le has pedido al “papa Noel”?

- Tom : La nueva nintendo DS3D, y muchos juegos.

- (tn) : ¿Pero, te has portado bien? 

- Tom: Claro que si!

- Cody: Bueno, bien lo que se dice bien, no. 

- (tn) : Y tu, que le has pedido al “papa Noel”? – Dije riéndome.

- Cody : Nada, mi regalo me lo acaban de hacer.

Nos quedemos mirándonos, yo sorprendida por lo que acaba de escuchar y el sorprendido por lo que había sido capaz de decir. 

- Tom: Yo creo que me voy a la cocina, con tu madre…

No es que quisiera que se fuera, porque Tom es un cielo y nunca me molestará, solo que en ese momento no le hubiera hecho mucho caso. Estaba en mi propio mundo. Estas iban a ser las mejores navidades de toda mi vida, o no.